Paisaje con dos tumbas y un perro asirio Amigo, levántate para que oigas aullar al perro asirio. Las tres ninfas del cáncer han estado bailando, hijo mío. Trajeron unas montañas de lacre rojo y unas sábanas duras donde estaba el cáncer dormido. El caballo tenía un ojo en el cuello y la luna estaba en un cielo tan frío que tuvo que desgarrarse su monte de Venus y ahogar en sangre y ceniza los cementerios antiguos.
Amigo, despierta, que los montes todavía no respiran y las hierbas de mí corazón están en otro sitio. No importa que estés lleno de agua de mar. Yo amé mucho tiempo a un niño que tenía una plumilla en la lengua y vivimos cien años dentro de un cuchillo. Despierta. Calla. Escucha. Incorpórate un poco. El aullido es una larga lengua morada que deja hormigas de espanto y licor de lirios. Ya vienen hacia la roca. ¡No alargues tus raíces! Se acerca. Gime. No solloces en sueños, amigo.
¡Amigo! Levántate para que oigas aullar al perro asirio.
Landscape with two graves and an assyrian dog
Friend, get up so you can hear the Assyrian dog howling. The three nymphs of the cancer have been dancing, my son. They brought mountains of red sealing wax and the course sheets where cancer slept. The horse had an eye in its neck and the moon was in a sky so cold that it had to rip open its mound of Venus and drown the old cemeteries in blood and ash.
Friend, wake up, the mountains still do not breathe and the grass in my heart is elsewhere. It does not matter that you are full of sea water. I loved a boy for a long time who had a feather under his tongue and we lived one hundred years inside a knife. Wake up. Be silent. Listen. Sit up a little. The howling is a great purple tongue that leaves behind the ants of terror and the liquor of lilies. It already comes near your rock. Don’t extend your roots! It approaches. It moans. Don’t sob in your dreams, friend.
Friend! Get up so you can hear the Assyrian dog howling.
Translated by Jim DossEtiquetas: Federico García Lorca |